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Día Mundial de las Ciudades 2025: replantear la Ingeniería Civil urbana

Viernes, 31 Octubre, 2025

El 31 de octubre se cierra Octubre Urbano con el Día Mundial de las Ciudades. Una iniciativa de la Organización de Naciones Unidas que cada vez cuenta con más estados adeptos. 

Tal y como explica la ONU, esta fecha “se estableció con el objetivo de promover el interés en la urbanización y fomentar la cooperación entre los países para aprovechar las oportunidades y afrontar los desafíos que plantea el urbanismo, así como para contribuir al desarrollo urbano sostenible en todo el mundoâ€. 

Este año, con la capitalidad de Bogotá (Colombia), se ha escogido el tema “Ciudades inteligentes centradas en las personasâ€. De esta manera, se destaca “el creciente reconocimiento de que el poder transformador de las tecnologías digitales está transformando la vida urbana en todo el mundo. Ofrece grandes oportunidades para mejorar el diseño, la planificación, la gestión y la gobernanza de las ciudades y los asentamientos humanos. En una era marcada por las transiciones urbanas y digitales, las ciudades recurren cada vez más a soluciones tecnológicas digitales y datos para ofrecer mejores servicios a los residentes y responder a los retos y oportunidades urbanos más importantesâ€.

Si atendemos a los últimos datos sobre población en ciudad, vemos que el 55% de los habitantes del planeta residen en áreas urbanas actualmente (ONU), con un incremento del 13% más hasta 2050. En total, 4.000 millones de personas residen en entornos urbanos, siendo Tokio la ciudad más poblada del mundo, con más de 37 millones de personas (World Population Review). 

En cuanto al uso de transportes sostenibles, los datos tampoco son buenos: “Según el Observatorio Metropolitano de la Movilidad (OMM), dentro de su resumen 2019-2020, en ciudades mayores, los desplazamientos no motorizados (andar y bicicleta) representan aproximadamente el 44 % de los viajes, mientras que los vehículos privados (automóvil y motocicleta) suponen alrededor del 43,3 %â€. 

Estos datos podrían haber mejorado de manera global en los países que han implementado el teletrabajo: menos desplazamientos de lunes a viernes y, por tanto, menor uso del coche. 

Ingeniería Civil en la nueva ciudad

Con esta información, sin duda, cabe recapacitar sobre la importancia de la digitalización de las grandes urbes desde la dirección técnica de la Ingeniería Civil. También, sobre la necesidad de cambio en las ordenanzas municipales para la correcta gestión de los cambios y la inclusión de todos los habitantes en el día a día de la ciudad.

De eso hablamos con Victoria María Flores, representante del proyecto TEAVIAL, II Premio a la Innovación en Ingeniería Civil: el sistema de pictogramas para niños con TEA no está contemplado en la mayoría de legislación de los ayuntamientos sobre Seguridad Vial. Así, temas como la discapacidad cognitiva todavía quedan fuera de la organización de elementos urbanos fundamentales (por ejemplo, pasos de cebra). 

¿Puede la digitalización avanzar en estos aspectos? En los últimos años, se están llevando a cabo medidas para el fomento del uso del transporte público por todos. A través de aplicaciones accesibles, se permite conocer las opciones de “conmutación†y de acceso a intercambiadores para moverse en tren, bus e incluso bicicleta. 

Los abonos transporte se han digitalizado para favorecer la rapidez en el acceso a los medios colectivos y se han generado nuevas modalidades para ahorrar en costes a la población, en parte gracias a la subvención del Gobierno y de las comunidades autónomas. Pero, ¿realmente está funcionando?

Medidas tradicionales

De manera paralela, se están volviendo a implantar medidas “antiguas†para la reducción del uso del vehículo privado en las ciudades. Hablamos de las supermanzanas (con servicios a menos de 15 minutos andando) y de la apuesta por una movilidad sostenible que pasa por caminar. 

Así lo explica el Ministerio de Transportes: “La movilidad sostenible supone entender el transporte como un derecho universal, adaptado a las necesidades de las personas, que pone el foco la movilidad activa y el transporte público como principales alternativas para la ciudadanía. Es una política que busca promover el bienestar al impulsar una movilidad más accesible, eficiente, eficaz e inclusiva, que contribuye a reducir las emisiones, mejorar la calidad del aire, ganar espacio para los peatones y ciclistas y disminuir la accidentalidadâ€. 

El organismo destaca, asimismo, que el 70% del espacio de las ciudades está dedicado al tráfico rodado, algo que se plantea revertir en base a la pirámide de la movilidad, en la que ir a pie es el mejor sistema y el coche es el peor. 

Desde las entidades públicas, así, se han marcado una serie de puntos fundamentales para conseguir que las ciudades y su organización pongan el foco en el disfrute de mejores entornos por parte de sus habitantes: 

  • Fomento de transporte público.
  • Ayudas al transporte colectivo. 
  • Ley de Movilidad Sostenible. 
  • Fomento de la movilidad a pie. 
  • Incentivar el uso de la bicicleta.
  • Promoción de los vehículos eléctricos e híbridos.
  • Desarrollo de infraestructuras de recarga. 

La pregunta a todas estas propuestas, tanto de digitalización como del retorno de los medios habituales de desplazamiento es ¿cómo se conseguirán estos objetivos? La respuesta es bien sencilla: a través de inversión y de gestión de esta por parte de profesionales cualificados y con experiencia en la construcción y gestión de grandes infraestructuras: los Ingenieros Civiles.