
Dubái, una ciudad de rascacielos
Martes, 20 Junio, 2023En el número 423 de Cimbra, la revista de Ingeniería Civil del Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas, se incluye la nueva sección “Ingenieros Viajeros”, que ofrece una perspectiva diferente al ocio turístico. En esta edición, nos vamos a Dubái de la mano de Rosa María Hernando Galve, Ingeniera Civil, Jefa de Unidad de Obras Públicas del Ayuntamiento de Zaragoza y Colegiada del Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas.
Esta ciudad se transformó violentamente tras el hallazgo de petróleo por parte de los Emiratos Árabes Unidos en 1996. El auge del desarrollo derivó en la construcción del edificio más alto del mundo, el segundo centro comercial más grande, uno de los hoteles más lujosos y más rascacielos que cualquier otra ciudad, además de Nueva York y Hong Kong.
Después de visitar Dubái por primera vez el pasado mes de junio de 2022, quedé impactada de ver lo que esta joya del Oriente Medio tenía para ofrecer. La gente a menudo olvida que hay siete emiratos en total, aunque Abu Dhabi y Dubái sean los más conocidos.
Desde encuentros increíbles con la vida silvestre, paisajes urbanos épicos y cocina internacional, hasta arte, cultura y actividades emocionantes. 365 días de sol al año, hermosas playas, puro lujo y una ciudad increíble y bulliciosa, Dubái es lo último en vacaciones en la playa y en escapadas urbanas, ya sea para disfrutar unos días en ella o hacer una escala en su camino hacia el Lejano Oriente o Australia.
Esta ciudad me intrigaba desde hacía tiempo. Me fascinó. Una ciudad de rascacielos hecha por el hombre construida en el desierto. No hace mucho tiempo, había dunas de arena donde ahora se encuentran los centros comerciales y hoteles de la ciudad.
Con sólo unos días allí, tenía muchas ganas de verlo y hacerlo todo. Empezando por ver las vistas aéreas de la ciudad desde el edificio más alto del mundo, el Burj Khalifa, y terminando por correr por las dunas de arena en un safari por el desierto.
Aunque esta ciudad ofrece mucho más para todos los gustos y bolsillos, como ir de compras, relajarse en uno de los hoteles más lujosos de la zona, playas de aguas tranquilas donde puedes darte un chapuzón disfrutando de las vistas del impresionante hotel de siete estrellas Burj Al Arab y el resto de los imponentes rascacielos.
Como he comentado al principio, mi primera visita fue subir al Burj Khalifa, ubicado en el Dubai Mall. Este es el edificio más alto del mundo, con 828 metros. Comprando un ticket estándar te permiten visitar los pisos 124 y 125, que fue lo que yo hice. Pero también existe la posibilidad de subir a la plataforma de observación más alta del mundo en el piso 148 (a 555 metros de altura). Las vistas son realmente sensacionales desde el Burj Khalifa y no sólo te haces una idea de la forma y el tamaño de la ciudad, sino que también ves cuántas hazañas arquitectónicas increíbles cubren la arena.
El Dubai Mall es el centro comercial más grande del mundo, hogar de más de 1.200 tiendas, más de 120 lugares para comer y beber, un cine con 22 pantallas, un acuario, una pista de hielo, muchas obras de arte originales y, probablemente, muchas más que ni siquiera descubrí. Paseando encontrarás tiendas de diseñadores como Armani, Versace y Ralph Lauren, pero también Zara y H&M.
Como curiosidad de este centro comercial, visité Candylicious, la tienda de golosinas más grande del mundo. Justo enfrente se encuentra el Acuario y el Zoológico Subacuático de Dubái. Es difícil pasar por alto la pared acristalada del acuario dentro del centro comercial, que contiene más de 300 especies de vida marina. También cerca de la entrada al acuario podemos disfrutar de la experiencia del simulador de vuelo del A380 de la línea aérea Emirates.
Una atracción obligada y que no cuesta dinero es el espectáculo de fuentes iluminadas, ubicado fuera del Dubai Mall (y frente al Burj Khalifa) es tan bueno como cualquier espectáculo de fuegos artificiales. Hay exhibiciones coreografiadas con música cada treinta minutos desde las 18:00 hasta las 23:00 horas. Es divertido, hermoso y una excelente manera de terminar el día en la ciudad.
También puedes divertirte en la nieve en Ski Dubai, donde hace -3 grados durante todo el año. ¡Sí, hay un centro de esquí en el desierto de Dubái! Se trata de la pista de esquí indoor más grande del mundo. En ella se puede practicar esquí, snowboard y otras actividades invernales. Se encuentra en el interior del Mall of the Emirates, un inmenso centro comercial no tan grande como el Dubai Mall.
Una visita que me gustó mucho y también impactante fue el trayecto desde el Dubai Mall hasta el Hotel Atlantis con parque acuático incluido, esté último, como no podía ser de otra forma, también considerado de los parques acuáticos más grandes a nivel internacional. En mi caso, el recorrido lo hice en metro desde la estación ubicada en el centro comercial hasta la zona de la Marina de Dubái, donde se coge el monorraíl de la Palmera Jumeirah, siendo ésta la mejor forma de moverse por las islas artificiales más famosas de Dubái. El tren viaja a través del tronco de la Palmera Jumeirah en un recorrido de casi seis kilómetros de extensión que culmina junto al Hotel Atlantis. Desde el monorraíl, se aprecian las enormes dimensiones de la isla, donde en cada hoja de la palmera hay construcciones.
Además de experimentar tantas modernidades, también tiene su encanto el casco antiguo de Dubái. La gente no asocia Dubái con la historia, pero créanme, hay un hermoso casco antiguo que espera ser explorado. Hablamos del barrio de Bastakiya, con edificios antiguos y zocos de textiles y especias.
Desde este barrio antiguo tomando un abra (un bote tradicional de madera), se cruza el Dubai Creek. El Dubai Creek es una ría natural que va desde la costa de Dubái hacia el interior, abarcando unos 10 kilómetros y que divide la ciudad en los dos barrios más antiguos de la ciudad.
Una vez al otro lado, estás a minutos del famoso Zoco del Oro de la ciudad, donde los escaparates son impresionantes, con collares, anillos e incluso trajes de cuerpo completo hechos de oro puro. También en esta zona de la ciudad te encuentras el Zoco de las Especias, el de los perfumes, el de las telas hechas a mano, el de los recuerdos especiales… Eso sí, ten paciencia con los comerciantes que te acechan en los anchos pasillos del mercado.
Como complemento de la visita a esta ciudad, está el famoso safari por el desierto de Dubái. Confieso que me daba pereza y algo de respeto el viaje en un 4x4 por las dunas del desierto, teniendo en cuenta que soy una persona de fácil mareo. Pero ¿cómo me iba a ir de Dubái sin visitar el desierto? Pensé que quizás me podría arrepentir y no tengo previsto repetir este destino a corto o medio plazo. Así que me tomé una pastilla para el mareo y me fui de excursión.
Sales de la ciudad hacia las dunas de arena en el 4x4. Una vez estás en las dunas, el chófer deshincha las ruedas para poder realizar el viaje previsto lleno de baches, volando sobre las interminables dunas. Existen, además, muchos lugares excelentes para tomar fotos, llevándote los guías al mejor lugar en las dunas para ver la puesta de sol.
Llegas a un campamento en el desierto, paseas en camellos, tomas un quad, coges una tabla y te deslizas por la arena (sandboard). Además, ves un espectáculo con fuego y de danza del vientre y, todo ello, todo mientras cenas barbacoa con comida típica.
En cuanto a playas, hay un montón para visitar en Dubái: públicas, como la de Jumeirah, y privadas, con tumbonas y servicio de camareros. También puedes darte un chapuzón en las piscinas infinitas de los imponentes rascacielos.
Eso sí, lo de caminar y pasear como en otras ciudades que visito y es algo que me encanta, el clima en estas fechas no lo permite, por lo que utilicé taxis de puerta a puerta que, en este caso y como la gasolina es barata, los precios no son excesivos. También utilicé algún metro y monorraíl para acercarme a la punta de la famosa palmera.
Más información
- Visit Dubai, la web oficial de Turismo de Dubái.
Autora. Rosa María Hernando Galve, Ingeniera Civil, Jefa de Unidad de Obras Públicas del Ayuntamiento de Zaragoza y Colegiada del Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas.
Artículo completo disponible en el número 423 de Cimbra, la revista de Ingeniería Civil del Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas.