Actualidad

La nueva normalidad requiere una nueva movilidad

Jueves, 28 Mayo, 2020

Cristina Beneroso Carrillo, Secretaria Técnica del Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas e ITOP, analiza para el blog de Unión Profesional los cambios que se van a producir en la movilidad en los entornos urbanos tras la crisis sanitaria. 

Con poblaciones en ocasiones excesivamente grandes y grandes distancias entre el puesto de trabajo y la vivienda, los movimientos en ciudades como Madrid o Barcelona se complican, más cuando la aglomeración de personas podría suponer rebrotes de contagios por la COVID.

“La primera solución que todos pensaríamos es desplazarnos en nuestros vehículos particulares con pocos ocupantes, pero el colapso circulatorio, el incremento de emisiones con el consecuente aumento de la polución, así como el problema de aparcamiento, lo convierten en una solución poco eficaz. A fin de cuentas, aunque es el recurso más extendido, el vehículo particular es el que más espacio ocupa y el que más contamina”.

Ante la necesidad de puntualidad que nos marcan los trabajos, no hay otra que buscar segundas y terceras alternativas. El transporte público deja de ser una opción. En urbes como Madrid, en la mayoría de los casos, los habitantes han de coger diferentes tipos de transporte público (bus, Metro y Cercanías), lo que supone no solo un mayor número de usuarios múltiples y, por tanto, un incremento del riesgo de aglomeraciones y colas, fomentadas además por controles de aforo. “Si bien es cierto que la flexibilización de horarios para diluir la afluencia de trabajadores es otra de las medidas que se proponen, las necesidades de atención al público siguen precisando de un horario relativamente concreto en el que no cabe demasiada flexibilidad. Aun así, resulta más importante que nunca disminuir la necesidad de movilidad de la población, fomentando el teletrabajo en todos los casos posibles”.

Pero, ante la inevitable “vuelta a la oficina”, los ayuntamientos han de mejorar unas vías que aún no cumplen con las necesidades básicas. En palabras de la Secretaria Técnica del CITOP “sería necesaria una remodelación de las infraestructuras adyacentes para proporcionar seguridad a los usuarios, de cara a convertirlo en un medio de desplazamiento habitual”. 

Ante todas las soluciones posibles y los inconvenientes que pueden llegar a plantear, especialmente en lo referente a la salvaguarda de la salud pública, Beneroso propone una de las vías menos explotadas en la mayoría de las ciudades: “la motocicleta eléctrica. Este medio de transporte, que a menudo pasa inadvertido, cumple con todos los requisitos para ser funcional con inmediatez: utiliza la infraestructura viaria existente sin requerir modificaciones, respeta el requisito de distanciamiento social, es una alternativa respetuosa con el medio ambiente y responde a la necesidad de desplazamiento a media distancia”. 

Con gran número de plataformas que permiten su alquiler por días e incluso horas y con la posibilidad de conducirlas con el permiso de circulación B, las motos eléctricas podrían solucionar dos de los grandes problemas actuales en la movilidad post COVID: evitar los contagios y no dar marcha atrás en los avances conseguidos en la lucha contra la contaminación.

CITOP

Desde el Colegio de Ingenieros Técnicos de Obras Públicas, seguimos colaborando con diferentes entidades en la divulgación de los nuevos roles de la Ingeniería Civil. Éstos pasan no solo por nuevas formas de urbanismo, sino también por la nueva movilidad, que se ha convertido en una de las necesidades urgentes de las urbes, especialmente en el contexto de la recuperación de la normalidad tras la COVID. 

Os dejamos el link al análisis completo, aquí.